Rodrigo Mora, el nuevo artillero de Universidad de Chile, habló de todo con Soy Azul. Señaló que el fútbol ofensivo por el que apuesta el equipo lo puede beneficiar y que conoce la pasión de la hinchada del “León”.
Es una mañana agitada para Rodrigo Mora. Aún instalado en el hotel que dispuso el club para hospedarlo en estos primeros días en Chile, mientras encuentra departamento, sólo la noche anterior llegó su familia. Por eso, el pequeño Máximo, su primogénito, no quiere separarse un segundo de su padre. “Se puso a llorar porque me iba, así que tuve que calmarlo un poco”, señala el charrúa, que hace una semana fue confirmado como refuerzo Azul y que esta tarde podría debutar con la camiseta del “Romántico Viajero”.
Pasan los minutos y Mora se acerca al hall del hotel para recibir a Soy Azul e iniciar un diálogo, que recorre varios aspectos, todos necesarios para conocer un poco más a la nueva carta de gol de Universidad de Chile para el Torneo de Clausura 2013-2014.
¿Cómo han sido estos primeros días en Universidad de Chile?
“Muy contento y adaptado. Hay un grupo muy bueno que me hizo sentir como si hace mucho tiempo estuviera aquí y eso me da confianza y tranquilidad”.
¿Qué es lo que sabías del club?
“Que era un gran equipo, porque me tocó enfrentarlo por Copa Libertadores, jugando por Peñarol. Es un cuadro que se ha hecho fuerte, tanto en la Copa Libertadores, como en Sudamericana y se ha ganado un prestigio grande. Vengo de un grande como River Plate a otro igual y lo hago con grandes expectativas”.
¿Fue ese prestigio de la U el que te llevó a tomar la decisión de venir a jugar a Chile?
“Sí, porque es un buen desafío en mi carrera. La U Juega Copa Libertadores, y si bien, primero hay un repechaje, creo que vamos a lograr pasar y estar donde merece este equipo. Después, hay que pelear partido a partido y tratar de llegar lo más arriba posible”.
Hay muchas expectativas en esta U. Llegó un nuevo DT como Cristián Romero y se espera de ti que seas el hombre gol. ¿Hay presión por eso?
“Cuando uno llega a un club grande, la presión está, es algo automático. Respecto del entrenador, en los pocos días que tengo acá, me he llevado una buena impresión. Trata de trabajar mucho con pelota, que para nosotros, en lo ofensivo, es muy importante. Quiere plasmar su idea de juego y trataremos de adaptarnos lo más rápido posible para que los resultados se den de la mejor manera”.
Se dice que el DT dispondrá un esquema bastante ofensivo, siguiendo la línea de lo que hace Jorge Samapoli. ¿Te acomoda ese sistema?
“Creo que es muy bueno. Lo que él nos dice es que seamos los delanteros quienes empecemos a presionar al rival y nos convirtamos en la primera marca. Después, nos pide jugar mucho y que hagamos verticales, que es positivo para que los delanteros tratemos de hacer muchos goles”.
Los comienzos de un goleador
Dejemos un poco el presente en la U y hablemos un poco más de ti. ¿Cómo fueron tus inicios en el fútbol?
“Yo arranqué en Juventud Las Piedras. Tenía 17 años, cuando se me dio la posibilidad de hacer la pretemporada y había un entrenador que me ayudó mucho, como Julio Rivas, que me hizo debutar en el profesionalismo. En ese período, también fui a jugar un torneo en Italia con el equipo y anduvimos muy bien, salimos campeones. Además, logré ascender a Primera con Juventud, que fue un gran logro”.
Luego vino el paso a Defensor Sporting…
“Claro. Es un club que si bien no es tan grande en Uruguay, siempre está jugando torneos internacionales. Durante ese tiempo, también me fui a préstamo a Cerro, que también jugó la Copa. Después volví a Defensor, donde salimos campeones y al poco tiempo partí a Benfica”.
Dentro de todo, comenzaste grande en el fútbol. ¿Soñabas en tu niñez con ser profesional?
“Yo jugaba en Nacional, un club de barrio…pero más a modo recreativo. No sabía si iba a ser profesional, todos mis amigos se estaban yendo a Montevideo y yo era de los últimos que quedaba, sin embargo, cuando me tocó, traté de dar un paso adelante y hasta hoy siempre traté de seguir así”.
¿Llegaron algunos de tus amigos al profesionalismo?
“Ninguno (ríe)”.
Imagino, que eres la envidia de todos ellos…
“Sí un poco, pero la verdad es que están orgullosos, porque en cada club en el que he estado les he llevado regalos. Además, siempre me han acompañado”.
O sea que tenemos un buen grupo de uruguayos que ahora serán hinchas Azules…
“Seguramente que sí. Donde yo estoy jugando, ellos acompañan mucho”.
Mora, el asador y orgulloso padre
¿Qué te ha parecido Santiago?
“Es una muy linda ciudad, segura y eso para mi familia es muy importante y a mí me da mucha tranquilidad. En Buenos Aires yo estaba tranquilo, pero no era lo mismo. Gracias a Dios me tocó llegar acá y ahora solo espero el gran día del debut”.
¿Probaste algo de la comida chilena?
“Es un poco picante y estoy tratando de adaptarme, porque no es lo mismo que la carta de Uruguay o de Buenos Aires. Son nombres diferentes y acá tengo que pedir que me expliquen. Lo que he probado es langosta, además del mote con huesillo, que me pareció buenísimo”.
¿Es el asado la especialidad de Rodrigo Mora, como todo uruguayo?
“Sí, me encanta. Cuando estuve de vacaciones hacía asado todos los días o día por medio. Si hay algo que me gusta es encender el fuego y quedarme cerca de la parrilla”.
¿Te pidieron los compañeros probar tu asado uruguayo?
“Por ahora no. Lo único que tengo es una invitación de Lorenzetti, Enzo y Ramón a compartir un asado con su familia, pero en general, todos me han hecho sentir muy bien”.
Tienes un hijo de un año y siete meses. ¿Qué significa en tu vida?
“Para mí, Máximo es un sueño. Yo amo a los niños y me tocó un varón. Soñaba poder entrar a una cancha con él y lo pude hacer en River. A él le encanta ver fútbol, cada vez que lo pongo en televisión empieza a gritar ‘gol, gol’. Si hay un juego que le gusta es la pelota y eso a mí me da mucha felicidad y orgullo. Obviamente, ya mandé a pedir la camiseta de la U con el número 11 para él”.
“Trataré de dejar todo”
La hinchada de la U es una de las más pasionales no solo de Chile, sino del continente. ¿La conoces?
“Cuando hablé con Andrés Lagos (gerente de Azul Azul), me dijo que es una hinchada muy fiel, que acompaña a todos lados. Cuando jugué acá por Peñarol ante la U, recuerdo que el estadio estaba divino y totalmente lleno”.
¿Algún mensaje para la familia Azul?
“Es un poco complicado hablar antes de entrar al campo de juego, pero estoy tranquilo y tengo muchas ganas de triunfar aquí. Trataré de dejar todo y lograr lo máximo que pueda, tanto en el torneo como en la Copa. Dejando todo de mí, los goles vienen solos. Queremos poner a la U donde se merece”.
Finalmente, se viene un año mundialista. ¿Te ilusionas con vestir la Celeste en Brasil?
“El sueño de todo futbolista es vestir la camiseta de su selección y poder jugar un Mundial. Yo creo que es difícil entrar, más hoy, donde hay delanteros que están en su mejor momento. Espero poder seguir trabajando de manera humilde, uno nunca sabe lo que puede pasar. Si no se me da, seré el hincha número uno en la Copa del Mundo”.
¿Cómo ves a Chile?
“Bastante bien, tienen un muy buen entrenador. Creo que este Mundial va a estar muy difícil, porque ya no hay diferencias entre sudamericanos y europeos”.