Universidad de Chile sale a buscar su estrella 17 ante Unión La Calera. Los jugadores Azules necesitan un triunfo y esperar el resultado entre Wanderers y Colo-Colo en Valparaíso.
Es imposible no sentir ansiedad. No hay hincha de Universidad de Chile que durante la semana, no haya visualizado lo que en pocos minutos más ocurrirá en el Estadio Nacional, cuando el equipo salga a la cancha a enfrentar a Unión La Calera, en la última fecha del Campeonato de Apertura, que ha sido comandado por el cuadro de Martín Lasarte, de principio a fin.
Es absolutamente imposible que al salir de la casa, no se haya acordado de llevar los audífonos, porque todos sabemos que aunque nuestra atención estará centrada en Ñuñoa, al menos un 1% de nuestros sentidos, también estará pendiente de lo que suceda en Valparaíso, donde Wanderers y Colo-Colo, los otros aspirantes a la corona, también se verán las caras.
Y es así, no hay mucho que ser. Los que amamos a la “U” sabemos que sin sufrimiento no vale. Esto no quiere decir que hoy queramos ver un partido tenso, pero sí es verdad que estamos preparados si es que toca de esa manera.
Nuestro DT, Martín Lasarte, señaló que al interior del plantel hay buenas percepciones de cara a lo que ocurrirá esta tarde. “Hay una sensación positiva y de optimismo, pero de todas maneras tendremos mucho respeto por el rival que enfrentaremos porque siempre el partido más importante es el que viene”, dijo “Machete”.
El adiestrador charrúa ha irradiado confianza en la previa, fundamentalmente, porque entiende que su equipo ha sido regular, agradeciendo a sus jugadores. “El grupo está respondiendo muy bien, por lo que estamos satisfechos por el rendimiento de todos a lo largo del torneo y me siento afortunado de contar con estos jugadores”, puntualizó.
Seguramente, nosotros sentimos lo mismo. No hay como no confiar en este equipo y en el Cuerpo Técnico. Son los mismos que nos han llevado nuevamente a lo más alto, los que nos dieron alegrías grandes, después de un semestre sufrido.
Ellos han hecho el esfuerzo durante 16 fechas, y nosotros, desde las tribunas se lo hemos retribuido con un aliento incesante. Hoy, sin embargo, eso no bastará. Habrá que quedar afónicos cuando las cosas puedan no resultar o perder la voz, cuando nos sigan deleitando con goles y un triunfo que nos permita bajar la estrella 17.
Que así sea, porque esta final, la jugamos 40 mil hinchas, con la garra de un león herido que tiene a su presa en la mira.