El lateral de Universidad de Chile responde frente a la campaña que he tenido el equipo, asegura que es momento de “ponerle el pecho a las balas”, pero también de entender que el grupo tiene las herramientas necesarias para dejar atrás el momento.
En un momento duro como el que está pasando Universidad de Chile, la voz de los referentes de un plantel golpeado, se hace muy necesaria de escuchar y leer. Y en eso, Matías Rodríguez no tiene problemas para ir al frente y analizar el presente del equipo, pero también para proyectar el futuro.
Hoy, la prioridad es salir de la actual situación, pero el campeón de la Copa Sudamericana del 2011, tampoco deja de pensar en el futuro. Esta es la voz de un duro dentro de la cancha y también fuera de ella.
¿Cómo está asumiendo el plantel este duro momento que está atravesando?
“Obviamente que sabemos que somos los responsables de esta mala campaña, somos conscientes y nos hacemos cargo. Por supuesto, la idea es revertir este momento y sabemos que nos quedan cuatro partidos, que son cuatro finales, para quedar lo más arriba posible y terminar pronto, para comenzar el torneo que viene de otra forma”.
¿Por qué ha costado tanto? Arrancaron de gran manera ante O´Higgins, luego vino el triunfo ante Cobresal, donde se pensó que venía la levantada, pero no se ha podido.
“Tanto nosotros, como los dirigentes e hinchas queremos jugar como lo hicimos contra O´Higgins y Cobresal. Nos encantaría que fuera así, pero nos fuimos contagiando con lo malo y ya está. Ahora hay que ponerle el pecho a las balas, sabiendo que estamos en una situación difícil, que debemos afrontar con la mayor responsabilidad y teniendo claro que contamos con las herramientas para salir de esto”.
¿Este tema pasa por lo futbolístico o más tiene que ver con lo mental?
“Para mí es todo mental. Quedó claro el otro día en Valparaíso, donde después del primer gol nos quedamos dolidos, dando vueltas y enseguida, nos hacen otro más. Logramos revertir la situación, pero en el segundo tiempo nos volvió a pasar lo mismo, entonces tenemos que estar más concentrados, sabiendo que no podemos regalar nada, porque estamos en la etapa en que cada error es un gol en contra”.
“Nosotros estamos unidos”
¿El tema del descenso es algo que realmente asumen como amenaza? ¿cuál es la realidad interna respecto de esto?
“La realidad es que nosotros tenemos que ganar y que no hay otra alternativa. No va a ser nada fácil, pero estamos concentrados y sabemos lo que tenemos que hacer. Estamos con las ganas de revertir esta situación, que a ningún jugador de equipo grande le gusta sufrir. Cuando uno anda bien, todo es mejor, pero cuando no, todo lo contrario”
¿Es un momento para que el grupo esté ahora más unido que nunca?
“Siempre, desde que llegó este cuerpo técnico, almorzamos juntos, trabajamos en doble turno y todo eso. Ellos siempre han buscado la unión del grupo. Nosotros estamos unidos, pero son los resultados los que mandan y eso es lo que se refleja para afuera”.
¿Son entendibles las críticas al entrenador o crees que a veces se exceden un poco?
“Como todo equipo grande, siempre se va a apuntar como primer responsable al técnico, pero nosotros estamos a muerte con él. Nos gusta la forma y la manera de entrenar, pero caemos en lo mismo de siempre: que a la hora de los partidos, no podemos demostrar lo que hacemos en la semana”.
Como uno de los símbolos de este plantel, ¿cómo manejas toda la presión que se ha generado?
“Obviamente, no me dejo mucho llevar por lo que sale en la prensa. Uno tiene que estar con la conciencia tranquila de saber lo que hace y lo que no. Siempre van a haber críticas y mientras tengan que ver con lo que pasa dentro de la cancha, yo las comparto. Lo que es extrafutbolístico, no me parece, porque desviar la mirada para otro lado”.
“La gente ya te pide otra copa”
Independiente del actual momento, se asume que mayormente te ha tocado bailar con la bonita en la “U”. ¿Cuáles son tus mejores recuerdos en este equipo?
“La Sudamericana fue el mayor logro personal y grupal con esta camiseta. Fue el título por el que más nos van a recordar, pero uno tiene que saber que esto sigue, el tiempo pasa y la gente ya te empieza a pedir otra copa, que es algo normal. Nosotros tenemos que luchar por objetivos como otro torneo internacional. En lo personal, la Libertadores me atrae mucho”.
Saliendo de este semestre, ¿ese debe ser el gran objetivo de la “U” como institución?
“Seguro que sí. La idea es ganar lo que nos queda ahora, pero empezar a mirar hacia arriba y terminar con otra confianza para dejar a la “U” donde corresponde”.
La forma en la que se puede reestructurar el plantel será importante para pensar en cosas mayores.
“Sin duda que van a llegar jugadores, porque es algo que pasa en cada período de pases. Ojalá que el club pueda hacer lo mejor y que lleguen los jugadores que pida el técnico. Lo que nos toque quedar, nos tenemos que matar”.
Desde lo personal, ¿cuáles son los desafíos que te has propuesto?
“Yo tengo contrato por dos años más, y obviamente los quiero cumplir, pero siempre y cuando me merezca defender esta camiseta, y no como dicen algunos, estar robando. Quiero jugar todos los domingos y si no, apoyar desde donde me toque”.
Lo que sí se percibe es el gran cariño que te tiene la gente de la “U”.
“La gente de la “U” es muy especial. En el momento en el que estamos, siempre nos han apoyado. A mí me ha tocado estar en otros lados, donde uno ando un poco mal y la gente desaparece del estadio. Al hincha Azul le tengo un cariño muy grande”.
¿Qué te gustaría decirles?
“Que me saco el sombrero por ellos. Han estado en todo momento, demostrando que son más files que cualquiera. Solo nos queda agradecerles por todo el apoyo que nos han dado desde siempre”.
¿Cómo te imaginas que estará la “U” en siete meses más?
“Levantando una copa”.
¿Cuál?
“Por ahora, la del Campeonato Nacional”.
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