David Pizarro camina por el Centro Deportivo Azul como si fuera su casa. Está gozando este momento de su vida, no quiere más problemas y su único deseo es pisar pronto el césped del Estadio Nacional para reencontrarse con la hinchada. “El CDA no se compara en nada al Caracol Azul”, ríe el “Fantasista”, mientras observa una de las canchas de entrenamiento. “Estos campos se ven en Europa”, continúa.
El año 2001 tuvo un pequeño periplo por el Romántico Viajero. En total fueron ocho los encuentros que disputó con los azules, anotando tres goles, dos de ellos en Copa Libertadores. Sin embargo, se quedó con las ganas de disfrutar más: “Había un lindo equipo y camarín. Disfrute mucho. Lamentablemente, me mandaron a buscar desde Udinese, pero fue una experiencia increíble”.
En tu presentación se te vio bien distendido con los periodistas, ¿sientes que estás en un momento en que hay que disfrutar más el fútbol?
“Estoy muy bien, aunque en estos días han querido desestabilizar esa felicidad, quizás no les gustó mucho la idea de que lo voy a disfrutar. Esto no me va a sacar de mi intención de seguir disfrutando y entregando mucho en la cancha, que es lo que espera la gente”.
¿Cómo fue la vida de David Pizarro después de un semestre sin club?
“La verdad es que me sirvió muchísimo para descongestionarme por todo lo mal que lo pasé el 2016. Fue un desahogo importante, en el cual me ayudó muchísimo mentalmente para cargar baterías y para darle un final feliz a una carrera importante”.
Desde que llegaste a Chile te persiguieron las lesiones, sabiendo que a lo largo de tu carrera nunca tuviste mayores problemas. ¿Qué explicaciones le encontraste a esto?
“Me fui adueñando de problemas que no eran míos, sobre todo porque estuve mucho tiempo fuera de Chile y la dinámica de los chilenos se me había olvidado. Entonces, me dio a entender de que todo es ‘agua para cada molino’. Quería resolver los problemas de otros y me fui encontrando con dificultades mayores que no podía solucionar y mentalmente me fui desgastando, dejando de lado lo mío, que era el fútbol”.
¿Pensaste en algún momento en que tendrías que retirarte forzadamente?
“(Ríe) Eso es lo que muchos han querido, hace rato, pero en ese sentido soy un peleador que siempre se levanta y lucha”.
Señalaste que tuviste ofertas de Italia, pero optaste por la U, ¿qué te llevó a tomar aquella decisión?
“Este es un país maravilloso y mi ciudad (Valparaíso) es la más linda del mundo. Estuve mucho tiempo lejos de mi familia, amistades. Era complicado, porque nos habíamos traído todo. Mis hijos están más grandes y es difícil alejarlos de sus amistades. Se toma una decisión en conjunto, si hubiese estado solo, a lo mejor hubiese vuelto”.
“Si tienes el compromiso, los resultado llegarán”
Cuando “Pek” llegó a entrenar junto al plantel, Ángel Guillermo Hoyos declaró que el volante era de su gusto y que hablaría con la dirigencia para reforzar al club. “Me enteré por los medios. Yo venía, entrenaba y me iba a mi casa como cualquiera. Me llamó gratamente la atención sus palabras”, confesó.
¿Qué te ha parecido Guillermo Hoyos?
“Ha sido un placer conocerlo, sobre todo en esta actividad que hay más malas personas que buenas, por todo lo que te lleva los resultados. La verdad que como persona ha dado una gratísima impresión y eso es lo que he valorado. Espero que le vaya bien en esta etapa”.
En este equipo hay jugadores de experiencia y exitosos, pero ¿el hincha se puede ilusionar con algo grande?
“Nosotros nos evaluamos por resultados y estos no han sido buenos, entonces no podemos venir y sentirnos candidatos porque te pones la camiseta de la U. Colocártela significa responsabilidad, competición, jugar bien al fútbol y encantar a la gente. Si tú tienes el compromiso, y si tienes un grupo muy estrecho, los resultados llegarán”.
¿Cómo ves la competencia en tu posición? Hay buenos jugadores.
“Es linda la competencia, es importante. Imagínate que competí con Yaya Toure, David Silva, Samir Nasri, Simone Perrota, Francesco Totti, o sea, estoy acostumbrado a competencias importantes y esta no es la excepción. Lo que más pueda ayudar y aconsejar a los muchachos, yo feliz”.
Radiografía al futbolista chileno
Llevas más de un año en Chile, ¿con qué fútbol te encontraste al retornar?
“El fútbol nacional está menos competitivo. Pasas la Cordillera y los resultados son malos, no refleja lo que es la selección, ya que antes tu selección era tu campeonato interno, pero hoy son dos cosas totalmente diferentes. Espero que podamos cambiar esta situación. Veo que los clubes apuntan a la cantidad y no a la calidad, por ahí va el error”.
¿Sientes que los jóvenes se preocupan más de los lujos?
“Hay que entender que son otras escuelas, una totalmente diferente a la mía. Es responsabilidad de los clubes ver qué quieren con sus chicos, teniendo en cuenta que son patrimonios del club. Si ellos quieren tener una plusvalía, es ahí donde deben trabajar”.
¿El barrio es una buena escuela para dedicarse al fútbol?
“Es necesario tener barrio para ser futbolista, la calle te enseña muchas cosas. Ese tipo de barrio me ayudó muchísimo para poder afrontar mi carrera afuera”.
Nos tocó contra Corinthians en Copa Sudamericana. ¿Es mejor o peor enfrentarse de un equipo de esa categoría?
“Ese es el problema mental que hay. ¿Por qué esperar a un equipo de menor categoría si está la posibilidad de jugar con equipos que te puede medir de manera importante? Si es por historia, este duelo debe ser de Copa Libertadores, entonces por ahí va, de quitarle un poco el sentido común a lo que es la competencia y poder ser grande”.
Eres un jugador que ha sostenido que le gusta leer e informarte, ¿qué tan importante es para el futbolista culturizarse?
“Culturizarse nunca está demás, siempre es importante, porque más allá del teléfono hay otra vida. Ellos deben navegar en otros conceptos para que se amplíen en su mentalidad. Teniendo ese tipo de información, al chileno le costaría menos adaptarse fuera de Chile”.
¿Crees que al futbolista se le trata como ignorante y que no tiene derecho a opinar?
“(Ríe) Eso es verdad. Este es un país de moralistas y eso me llama la atención. Por ahí pueden tener conflictos en sus casas, pero van a opinar de la tuya como quieran. Es eso lo que está pasando en nuestro país. Se resta, no se suma”.
Si pudieras definir tu carrera en una palabra, ¿Cuál sería?
“Maravillosa. Siempre doy gracias a Dios por la oportunidad y el talento. Me privé de muchas cosas para hacer todo lo que hice y porque estoy convencido de que terminará de una manera muy importante”