La condición de la cancha del estadio Santa Laura es otra variable que no puede dejar de considerarse para el Superclásico de este sábado, que comenzará a las 15 horas.
Y una inequívoca prueba del estado del campo se podrá ver este jueves, cuando a partir de las 20 horas Unión Española y Universidad Católica escenifiquen el comienzo de la vigésimo tercera fecha del Campeonato Nacional.
¿Por qué importa tanto? Porque se podrá tener una idea de la condición con la que estará la cancha para el Superclásico, teniendo en cuenta el alto tráfico que ha tenido el recinto de Independencia durante este segundo semestre, y que el gramado nunca volvió a tener la misma calidad desde aquella vez en que quedó destruido por el partido de rugby entre Chile y Estados Unidos, en julio del año pasado.
Santa Laura fue utilizada por última vez para un partido oficial el pasado sábado, cuando Universidad Católica derrotó a Ñublense. Y la conclusión sigue siendo la misma: no es una cancha que esté en buenas condiciones. La superficie sigue estando irregular, en los sectores de las bandas hay muchos parches de sembradío que hacen que este muy dispareja y la falta de compactibilidad del pasto, en general, obliga a que el promedio de los controles del balón se haga de un modo más desprolijo.
La tarde-noche de este jueves se podrá ver si estos cinco días de descanso, y sin precipitaciones, ha hecho que la cancha pueda asentarse de mejor manera, para asegurar un mínimo para este sábado de Superclásico.
