Corrían los 65 minutos cuando Darío Osorio ingresó en reemplazo de Charles. La indicación del director técnico del Midtjylland FC, Thomas Thomasberg, fue clara: recostado como delantero, pegado a la banda derecha para explotar sus diagonales o remates de distancia, pero sí con la obligación defensiva de taponear los descuelgues del lateral izquierdo del Viborg.
Osorio cumplió a cabalidad el posicionamiento y parte de las indicaciones tácticas en su segundo partido jugando por su nuevo club. No tuvo, por cierto, ninguna opción de probar remates de distancia. Pero las demás instrucciones fueron todas cumplidas a cabalidad por el exazul, a lo largo de los 71 minutos (tiempo agregado incluido) que estuvo en la cancha.
Fue así que el exjugador de Universidad de Chile vivenció su primer Derby de Jutlandia, un tradicional pleito entre el Midtjylland y el Viborg, que esta vez terminó igualado a dos tantos, estando el equipo del chileno dos veces arriba del marcador.
Para Darío Osorio queda la satisfacción de haber sumado más minutos en el ataque del Midtjylland, que en esta octava fecha de la Superliga danesa adiciona 11 puntos, aunque sigue con la preocupación de no poder ganar en los últimos cuatro partidos de la liga local.
