Tensión existía en el Estadio Nacional. El partido entre Universidad de Chile y Deportes Copiapó se mantenía sin goles cuando el cuarto árbitro entregó los minutos de adición. El balón no quería entrar hasta que Franco Calderón encontró un rebote en el área y anotó el único tanto del compromiso.
La algarabía fue total en el Coloso de Ñuñoa. Los espectadores se abrazaban y los hinchas azules de todo el país gritaban la conquista que dejaba al Romántico Viajero como único líder del campeonato. Sin embargo, sorpresa hubo en el banco al ver a Gustavo Álvarez totalmente desaforado celebrando la diana del Chaco.
Celebración eufórica de Gustavo Álvarez
Al momento de ingresar el balón a portería, el entrenador argentino no se aguantó las ganas de festejar la anotación del defensor, como si estuviese aguantándose durante todo el partido el grito de gol.
Las cámaras de TNT Sports captaron el instante preciso en que el estratega trasandino observó el balón introducirse al pórtico de Richard Leyton, donde salió saltando junto a sus dirigidos, imagen que recordó bastante los tiempos de Jorge Sampaoli.
Una vez terminado el cotejo, la señal oficial le consultó sobre este hecho y reconoció que “más que un festejo, fue un desahogo. Uno va acumulando energía con tanto gol errado que, cuando vino el gol, lo celebré“.
