Universidad de Chile se quedó con la sexta Copa Chile de su historia tras ganarle por la cuenta mínima a Ñublense, quien le complicó las cosas, pero lo bastó ante la jerarquía que mostró el cuadro estudiantil en el Estadio Nacional.
Uno de los principales gestores de este renacer azul fue, sin duda, su entrenador, Gustavo Álvarez, quien logra su segundo título consecutivo a nivel personal en el fútbol chileno, aunque desligándose de toda gloria, con la humildad que lo caracteriza.
Álvarez y el regreso de la U a los festejos
Esta noche todos los camaradas brindan por la Universidad, que logró cerrar su gran año de manera merecida con una vuelta olímpica ante su gente, aquella que se le impidió hace unas semanas atrás, pero que hoy, de la mano de un cuerpo técnico serio vuelve a agregar una estrella más al firmamento azul.
Gustavo Álvarez, despojado de toda vanagloria, aseguró que “me parece que no soy artífice, de mi lugar aporté lo que pude. Lo comparto con la dirigencia que me abrió las puertas del club, lo comparto con el cuerpo técnico, staff, funcionarios, el plantel y toda esta gente más la que no pudo venir”.
“Siempre los equipos reflejan lo que son las instituciones. Nosotros pudimos en un año conseguir esto. Merecíamos coronarlo porque el título, el reconocimiento es necesario ante un buen trabajo como, creo, que se hizo”, reconoció el DT de 51 años quien también agradeció al país por la oportunidad de trabajo.
“Agradecido de Chile que me abrió las puertas para trabajar, desarrollar la profesión y, sobre todo, que me trataron con muchísimo respeto desde que llegué, tanto el año pasado como este”, cerró el director técnico que le devolvió la alegría a toda una fanaticada bullanguera.
Primer partido del 2025: Supercopa contra Colo-Colo
Consultado por la Supercopa que disputará ante el clásico rival en el primer partido de la próxima temporada, el estratega argentino señalo que lo que se haga en el 2025 debe ser superior a lo que se hizo en la campaña que acaba de finalizar.
“Siempre, hay que prepararse y el año que viene, la meta tiene que ser superar lo alto que quedó la vara este año, pero hay que superarlo”, cerró Gustavo Álvarez quien consiguió su tercer título como entrenador.