Suman y siguen los episodios en torno a la crisis que se está viviendo en torno a la administración de Universidad de Chile, luego de que la CMF levantará un oficio investigando los últimos movimientos financieros.
Bajo este panorama, se congelaron los refuerzos e incluso desde la Casa de estudios alzaron la voz cuestionando el daño que se le podría hacer a la U.
Justamente, en esta línea alzó la voz en conversación con El Mercurio, el segundo máximo accionista de Azul Azul, Daniel Shapira, quien manifestó su disidencia y descontento con todos los oscuros movimientos de Michael Clark y su círculo.
La disidencia de Azul Azul alza la voz
“Es un chiste, una burla. Imagínense que compré el veintitantos por ciento de Azul Azul en US$15 millones, ¿y ahora Clark controla el 64% pagando solo US5,6 millones?”, manifestó de entrada el molesto dirigente azul.
Toda la situación del repentino ascenso de Antumalal y Michael Clark, está impactando en el prestigio de la institución azul.
“Me daña. Esto es, a mi juicio personal, una venta fraudulenta y es un camino que voy a investigar. Ellos pagaron US$15 millones a Heller por el 63% y ahora están vendiendo en poco más de 5 millones, alguien pierde 9 y nadie dice nada”, cuestionó la voz disidente dentro de la dirigencia.
Bajo este panorama, Daniel Shapira manifestó que todo Azul Azul debe sufrir un radical cambio en la estructura de Azul Azul, especialmente tomando en cuenta el mal uso que están teniendo los actuales controladores.
“Quiero que haya un cambio, hay que obligarlos a que salgan, que vendan, que dejen el control de la institución. Abusan de su poder. Hacen lo que quieren. Esa es la verdad, un chiste”, concluyó el también parte de la administración.