Molestó y exaltado se encontraba Ronnie Fernández cuando vio la tarjeta roja en el banco de suplentes. Y no era para menos, el delantero nacional escuchaba como desde las gradas le gritaban “chileno HDP”.
Todo ocurrió en la final de ida de la Copa de Bolivia entre Jorge Wilstermann y Bolívar. Corría el minuto 73 cuando el exjugador de Universidad de Chile empieza a increpar al cuarto árbitro por los insultos de la barra local y termina siendo expulsado por el juez central.
El otrora capitán del Romántico Viajero, que no disputó ningún minuto del encuentro, se vio ofuscado por la decisión y pidió explicaciones, sin obtener respuesta. “Estás avalando el racismo”, dijo el atacante al réferi asistente.
Se va de Bolívar
El 2 a 1 a favor de su club pasó a segundo plano, pues dejó la grande. “Aún esperando el informe arbitral. No aclaren que oscurece. Ya todo está dicho: Bolívar es un oasis dentro de todo esto. Ojalá nunca te bajen”, escribió en sus redes sociales.
Este mensaje recibió mucho apoyo de la parcialidad del conjunto de La Paz, pidiéndole que no abandonara al equipo. “Jamás he jugado a la victima amigo. La verdad estamos muy agradecido como familia de todo lo que el país nos ha entregado, mucho cariño y respeto, pero el tema fútbol es aparte”, contestó a una de las respuestas.
Es más, el presidente del club, Marcelo Claure, entendió el sentimiento del barbón: “¡Oasis es la palabra perfecta! Gracias Ronnie por todo lo que hiciste este año. Entiendo y comparto tu deseo de marcharte“.
El artillero, que marcó 23 goles en el año, tendría ofertas del fútbol mexicano. Por lo visto, su futuro está lejos de tierras altiplánicas.